Hablar de una película de Kim Ki-Duk es una experiencia casi tan grande como ver sus películas y hacer la crítica de una película de este señor es una verdadera putada por que ¿qué puedes decir de una película practicamente perfecta?
La historia de dos amigas que quieren realizar el viaje de sus vidas y que para conseguir el dinero para ese viaje una se prostituye y la otra de "chulo", la muerte de una de ellas, el camino hacia la redención y la historia de un padre que se siente traicionado por su propia hija es realemente fascinante, que un director pueda contar todo eso sin hacerse la picha un lío y rizando el rizo con cada plano, cada mirada, cada frase y sobre todo con cada silencio es digno de elogiar. No estamos hablando de un cualquiera, estamos hablando del hombre que me emocionó, y de que manera con El arco y del que no había visto nada hasta este film que me ha dejado agotado. Gran parte del mérito del film lo tienen las dos actrices protagonistas que hace que te dejes llevar por la ingenuidad de una y por la madurez de la otra, esa relación de amistad entre las 2 amigas y el camino que una de ellas debe tomar tras la muerte de la otra es realmente triste, la película es muy triste pero es también muy valiente, trata de una manera muy cruda el tema de la prostitución y sientes asco y repugnancia por esos personajes secundarios, esos clientes de las protagonistas que están tan bien construídos que sientes asco al verlos. El otro gran punto fuerte del film es el personaje del padre de una de las niñas, el sentimiento de ese hombre al ver lo que su hija está haciendo, el descubrimiento de una mentira y como ese pobre hombre aprende a vivir con esa mentira que le está matando por dentro pero que le obliga a esbozar una sonrisa frente a su hija es uno de los personaje smás bien escritos y más tristes que he visto en años.
En fin, que esta película no es una película más, es una experiencia que permanecerá en tu mente por mucho tiempo.
10/10
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