PÓSTER DEL REMAKE DE OLD BOY

Cuando me enteré de que Hollywood iba hacer un remake de una de mis películas favoritas, como es Old boy, del coreano Park Chan Wook, me eché a temblar, me arrinconé, me acurruqué y simplemente temblé ante tal atrocidad.

Old boy cuenta la historia de un hombre al que secuestran durante quince años hasta que un buen día lo liberan, sin saber muy bien porque lo encerraron el pobre hombre buscará venganza.
La historia, basada en el manga de Nobuaki Minegishi es potentísima como la que más, la acción la dirección, la fotografía y el escalofriante final la convierten en mi principal película de culto. Por eso que ahora Spike Lee se ponga a las órdenes de este remake, con Josh Brolin y Samuel L. Jackson en el reparto, aunque me de cierta confianza me da mucho miedo. Convertir esta película en un producto hollywoodiense como ya pasó con el remake de Matt Reeves de Déjame entrar, que si bien salió bastante bien parado no sirvió en nada a la experiencia de la obra original; pues esto mismo pasará con este Old boy, habrá acción, habrá estilo, pero se echará mucho en falta la gracia y el talento de la original. Esto es así.