Esta película no es una película cualquiera, es una novela negra en movimiento, es un grandísimo homenaje al mejor cine negro y es José Coronado.
Si algo tiene Enrique Urbizu es que cuenta historias como Dios, sabe liarlo todo y desenrrollarlo después y meterte un final super jarto con los personajes on fire total a base de tiros y frases lapidarias que te quedas blanco y con los huevos dando palmas. Y esta película es un claro ejemplo de lo bien que escribe este hombre, el film gira en torno a Santos Trinidad, un policía bastante degenerado, guarrete y alcohólico que una noche comete un crimen y se le escapa un testigo, a grandes rasgos de esto va el film, pero a partir de aquí Urbizu se monta un trama super enrevesada de la ostia y unos personajes intrigantes que te cagas que te llevan por este camino por donde se pasea el narcotráfico y la Yihad a sus anchas. Y ya está y ahí te lo dejo; este tío sabe que escribe de puta madre y por eso nos lo demuestra una y otra vez, un crack.
Pero si algo cabe destacar, y mucho es a José Coronado, el actor se marca aquí una de esas sesiones de Stanislasky en vena y se mete hasta lo más hondo de este policía tan corrupto, por un momento te olvidas de Coronado y solo ves a Santos Trinidad intentando solucionar su caso. Es uno de esos personajes que marcan la carrera de un actor y Coronado lo sabe bastante bien por eso da lo mejor de sí mismo y hace que la película pase de ser grande a ser mítica.
8'5/10
